No le tenga miedo a nada.
Usted es eterno.
Sepa que cada minuto la prescencia divina está obrando por su intermedio; y que usted no es nada más que un instrumento.
Todo el mundo tiene un corazón, aprenda a llegar a él. Compórtese de tal modo que pueda transformar a los otros corazones y derretirlos.
Siempre hay una manera positiva de mirar las cosas.
EL mundo entero es una universidad de todo, y todos nos enseñan.
La razón básica de nuestro miedo es la falta de conocimiento de nuestro "yo verdadero", que es indestructible y eterno.
El conocimiento verdadero es saber cómo utilizar todo para el beneficio de todos.
Usted se sentirá verdaderamente libre sólo cuando se conozca a sí mismo. Sepa que usted ya está libre, nunca fue un esclavo. El pensar que es un esclavo es ignorancia. El "yo verdadero" es puro y no es esclavo. El "yo verdadero" es puro, eterno, inmortal, inalterable, jamás corrompido y siempre tranquilo.
A todo lo que llame "suyo" no es de usted; usted es un pasajero en el cuerpo, pero no el cuerpo en sí.
Renuncie a todo lo que llame suyo y trate de apartarse de todas esas cosas. Este alejamiento, este aislamiento psicológico del ego, es la base de su mente.
En lo que usted piense se convertirá. Piense bien, y estará bien. Piense mal, y estará mal. Todo está en su manera de pensar.
Siempre debemos pensar lo mejor.
Entrene a sus ojos para ver las cosas positivas en todo.
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